La pandemia que enfrentamos en este momento nos ha impuesto distanciamiento físico con el entorno, debido a que el virus es sumamente contagioso. Es por ello que el transporte público significa para muchas personas un foco de contagio importante y buscan alternativas de transporte donde minimicen el contacto con los demás. Por esta razón se ha generado un incremento en la venta de bicicletas y scooters eléctricos.
Diferentes opciones para evitar el transporte público
El arriendo de estos equipos a través de aplicaciones también ha representado una opción para quienes desean evadir el uso del metro o las micros; pero al estar expuestos en las calles y ser usados por varias personas, se deben tener previsiones de desinfección antes de ser ocupados.
Caminar ha sido una buena alternativa para muchos ya que se ejercitan, ahorran dinero y evitan el contagio al mismo tiempo, pero cuando se trata de caminar largos tramos, esta opción queda descartada.
Lo recomendado para controlar la propagación del virus ha sido quedarse en casa, pero en algún punto teníamos que volver a la normalidad, aun cuando el virus se encontrara presente en nuestro día a día. Por esto es necesaria una posibilidad de transporte menos riesgosa y es cuando llega el momento de brillar para los scooters eléctricos, por lo que se ha incrementado la venta de este medio de transporte unipersonal.
Razones que influyen en el incremento de las ventas
Siendo una alternativa económica frente a la adquisición de una motocicleta o un auto, han sido muchas las personas que se inclinan por la compra de un scooter propio para su movilización particular.
En este momento los expertos recomiendan el distanciamiento social o mejor dicho el distanciamiento físico al menos de un metro de separación con el resto de las personas para evitar la propagación de este contagioso virus, medida que tal vez debamos mantener por muchos meses mientras el virus continúe afectando a la humanidad o hasta que desarrollen una vacuna contra él.
Desplazarse en un scooter eléctrico propio es una excelente forma de cumplir con esta medida de distanciamiento, quienes ya tienen su scooter o lo adquirieron recientemente a raíz de la aparición del Covid-19, afirman que les ha generado mayor tranquilidad al no exponerse a posibles contagios en el transporte público y al poder evadir fácilmente lugares con alta congestión de personas que se desplacen a pie o en otro tipo de vehículos.
El delivery a través de aplicaciones
Muchos países implementaron medidas de cuarentena y uno de los servicios permitidos en su mayoría ha sido la entrega de productos o alimentos a domicilio, como resultado de esto las bicicletas y los scooters eléctricos se convirtieron en el mejor aliado de los repartidores, para poder cubrir mayores distancias en menos tiempo.
Lamentablemente, esta situación de emergencia sanitaria en el mundo, ha traído como resultado el cierre de empresas o la suspensión de contratos de trabajo, lo que ha aumentado el porcentaje de desempleo; con esta cadena de acontecimientos, son muchas las personas que se han registrado como repartidores en conocidas aplicaciones de delivery para compensar el ingreso que tenían en sus empleos y al requerir un medio de transporte que les permita optimizar el tiempo, optan por vehículos eléctricos como los scooters para movilizarse de forma más rápida.
Quizás algunos puedan escoger las bicicletas como medio idóneo para este tipo de actividad, pero muchas veces no cuentan con estacionamiento para ellas ni espacio suficiente para guardarlas en pequeño departamentos, esto no es un inconveniente para los scooters eléctricos que pueden ser plegados y volverse muy compactos.
Es claro que el scooter eléctrico no es una moda ni un juguete, como dice la conocida frase “llegó para quedarse” y en casos como este, llegó para ayudarnos a enfrentar la difícil situación de emergencia mundial.